La corte brasileña ordena la suspensión a nivel nacional de la aplicación de mensajería Telegram después de que la empresa matriz no proporcionara datos sobre los neonazis que operan en la red.
Un tribunal brasileño ordenó el miércoles la suspensión en todo el país de la aplicación de mensajería Telegram después de que su empresa matriz no proporcionara los datos solicitados por las autoridades sobre los neonazis que operan en la red, dijeron las autoridades.
La medida se produjo después de una serie de violentos ataques escolares, al menos uno de ellos relacionado con intercambios sobre un grupo con tendencias antisemitas.
El ministro de Justicia, Flavio Dino, dijo que el tribunal multó a Telegram con un millón de reales (unos 198.000 dólares estadounidenses) por día por “no cumplir” con una investigación en curso sobre la actividad neonazi en las redes sociales y ordenó la “suspensión temporal de [sus] actividades”. “
“Hay grupos llamados ‘Frente Antisemita’ y ‘Movimiento Antisemita’ actuando en esas redes, y sabemos que eso está en el centro de la violencia contra nuestros niños”, dijo el ministro en un video enviado a los periodistas.
A principios de este mes, un hombre que empuñaba un hacha mató a cuatro niños de entre cuatro y siete años en su escuela, en la misma semana que otros dos ataques escolares no mortales.
El mes pasado, un niño de 13 años mató a un maestro en un ataque con cuchillo en una escuela en São Paulo.
En noviembre, un tirador de 16 años mató a cuatro personas e hirió a más de 10 en dos ataques contra dos escuelas en Aracruz, en el estado de Espirito Santo, en el sureste del país.
El sitio de noticias G1, citando fuentes policiales, informó que el adolescente supuestamente había interactuado con grupos antisemitas en Telegram, uno de los canales de comunicación favoritos del expresidente de extrema derecha Jair Bolsonaro.
Según un documento de la autoridad de justicia federal en Espirito Santo, en el sureste de Brasil, los investigadores le habían pedido a Telegram los datos personales de los miembros de dos grupos antisemitas declarados en la plataforma.
La compañía entregó solo datos sobre el administrador de uno de los grupos, dice el documento, y agrega que Telegram tenía “la intención de no cooperar con la investigación en curso”.
‘Epidemia’ de atentados’
El gobierno del presidente izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva anunció recientemente restricciones en las redes sociales en un intento por frenar la “epidemia” de ataques escolares.
Dino, el ministro de Justicia, dijo hace dos semanas que se ordenaría a los sitios que tomaran medidas para prohibir el contenido y los usuarios “que promuevan o apoyen ataques o violencia contra las escuelas”.
Las empresas de redes sociales también deberán enviar datos a la policía sobre todos los usuarios que comparten contenido violento y bloquear a los usuarios prohibidos por compartir contenido violento para que no creen nuevos perfiles.
El gobierno está trabajando en una ley separada para regular la actividad de las redes sociales.
En marzo de 2022, un juez de la Corte Suprema bloqueó Telegram por no cumplir con las órdenes de las autoridades de eliminar los mensajes que contenían desinformación en un año electoral.
Posteriormente se levantó la prohibición.
Bolsonaro, a quien se le bloquearon varias publicaciones en Facebook, Twitter y YouTube por violar las reglas de desinformación, había alentado a su base a unirse a él en Telegram, donde tenía más de un millón de seguidores.
La aplicación se ha instalado en alrededor del 53 por ciento de los teléfonos móviles en Brasil, un país de más de 200 millones de habitantes.
En 2022, fue la plataforma de mayor crecimiento en el gigante sudamericano, según las autoridades brasileñas.
Fuente: batimes
